El futuro del trabajo es inseparable del futuro del aprendizaje, y el año 2020 ha conseguido presentarnos nuevos retos en ambos ámbitos. Las empresas de todo el mundo tienen que aprender a navegar en un nuevo espacio de trabajo con equipos remotos repartidos por distintas geografías. Si bien abordar esos retos es un esfuerzo a largo plazo, encontrar el equilibrio entre afrontarlos y prosperar es más necesario que nunca.